Crimepod Puerto Rico

El Fuego del Dupont Plaza

December 30, 2020 Armando Torres Season 1 Episode 32
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El Fuego del Dupont Plaza
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Show Notes Transcript

El 31 de diciembre del 1986 miles de turistas, principalmente norteamericanos, llegaron hasta Puerto Rico para pasar el fin de año en un clima veraniego y tropical. Algunos de estos se quedaron en el Hotel Dupont Plaza en San Juan sin imaginarse lo que estaba a punto de suceder. En este episodio hablamos del incendio del hotel Dupont Plaza el cual cobró la vida de casi 100 personas.

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Música de fondo:  "Tensions" by David Fesliyan,
Audios: Reportajes de WKAQ y WAPA en YouTube :
Carlos Rubén Ortiz 



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Saludos espero que se encuentren bien y bienvenidos al último episodio de Crimepod Puerto Rico del año 2020. Ciertamente la acogida de este podcast ha sido mucho mayor de lo que yo me hubiese imaginado el día que comencé en mayo con el episodio del Monstruo de Utuado. Quiero darle las gracias a todas las personas que escuchan este podcast, que siguen a CrimepodPR en Facebook, Twitter e Instagram y sobre todo a los que lo apoyan a través de patreon.com/crimepodpr. También quiero agradecer a todos los compañeros podcasteros que me han invitado a sus respectivos podcasts y que me han ayudado a alcanzar a más personas como Cucubano Podcast, Tira y Jala Podcast, Plan de Contingencia, Que es la Que Podcast, The Birra Lounge, El lio del caso, En serio podcast, Cinexpertos PR, Elijah’s Voice en Facebook y Curiosidad Científica Podcast. 

Han sido muchas las personas que de alguna manera u otra han ayudado a que sepas de la existencia de este podcast y no puedo dejar fuera de la lista a Jowell, a Chente Ydrach ni a Benjamín Torres Gotay.

A todos los que de alguna manera u otra me han apoyado, muchas gracias. Si alguien se me quedó fuera de la lista, me lo dejan saber por DM para pedirles disculpas.

El terrorismo en Puerto Rico es un crimen poco común. Cuando escuchamos la palabra terrorismo pensamos de inmediato en el 9/11, en los ataques extremistas que ocurren en Europa o en el medio oriente. Si te digo mencióname 3 ataques terroristas que hayan ocurrido en la isla quizás se te haga imposible mencionarme alguno. El 31 de diciembre del 1986 miles de turistas, principalmente norteamericanos, llegaron hasta Puerto Rico para pasar el fin de año en un clima veraniego y tropical. Algunos de estos se quedaron en el Hotel Dupont Plaza en San Juan. Durante su estadía, disfrutaron de las piscinas del hotel, de la playa y de todas las atracciones que nuestra isla ofrece. Otros turistas y también locales estaban en el casino jugando y pasándola bien, sin embargo, no se imaginaban lo que estaba a punto de suceder.

El Dupont Plaza Hotel & Casino fue inaugurado en el año 1963 en la 1309 de la avenida Ashford en el Condado. Originalmente era conocido como El Puerto Rico Sheraton hasta el hasta 1980. Su nombre cambió entonces al Hotel Dupont Plaza.

Los empleados unionados del hotel estaban en medio de un conflicto laboral con la gerencia del hotel; Desde el mes de octubre la unión estaba en negociaciones con el hotel. 250 de los 450 empleados del hotel pertenecían a la unión.  Según la unión la gerencia del hotel planificaba despedir a 60 empleados unionados para reemplazarlos por empleados que no pertenecieran a la unión.

La situación entre la unión y la gerencia del hotel estaba tan tensa que durante la última semana del año ocurrieron 5 incendios intencionales en varias áreas del hotel que pudieron ser controlados. La administración del hotel aumentó su seguridad contratando más de 30 guardias armados que daban rondas preventivas las 24 horas para tratar de lidiar con esta situación y evitar los incendios.

La preocupación de que algo grave sucediera era tanta que los mismos empleados del hotel, los taxistas turísticos y los empleados de los restaurantes del área del Condado le aconsejaban a los turistas y a los demás visitantes que se mantuvieran lejos del hotel y del casino. 

La unión de empleados convocó una reunión en el salón de baile del hotel para la tarde del 31 de diciembre de 1986. El jefe de seguridad le advirtió al administrador del hotel que no permitiera la reunión allí debido a las amenazas y a los incendios que habían sido provocados por los mismos tronquistas. Al terminar la reunión, a eso de las 2 de la tarde, los 125 miembros que estuvieron presentes en la convocatoria votaron a favor de comenzar la huelga a partir de la medianoche. 

Se estima que, en ese momento, en el hotel había entre 900 a 1,000 personas contando empleados, huéspedes y visitantes del casino. 

Justo al terminar la reunión en donde se decidió el voto de huelga un incendio voraz comenzó en un área adyacente al casino. De inmediato hubo como una explosión y el incendio se comenzó a propagar por todo el casino. En el casino había unos extractores que servían para expulsar el humo del cigarrillo. Estos extractores comenzaron a inhalar el humo, y los gases del fuego y lo propagaron hacia los pisos de arriba del hotel. Ya en este punto el casino y el lobby del hotel se había convertido en un infierno.

En el casino había unas 150 personas que estaban atrapadas por el fuego.

Una multitud se abalanzó contra las puertas de salida que tenía el casino para tratar de escapar, pero quedaron atrapados ante el desespero y el caos que había en el lugar. Según indican algunas fuentes de información las puertas del casino solo abrían hacia dentro y por el pánico que tenían las personas que trataban de escapar del fuego no se dieron cuenta de ese detalle y trataban sin éxito de abrir las puertas empujándolas hacia afuera. Algunas personas utilizaron sillas y objetos del casino para romper las ventanas y se tiraron desde el segundo piso del casino hacia el área de la piscina. Muchos de ellos resultaron heridos por la caída. Otras personas murieron por inhalación de humo en el casino y en los pisos superiores. Algunos trataron de escapar tomando los ascensores hacia el lobby. Cuando se abrieron las puertas se dieron cuenta de que el camino estaba bloqueado por el fuego y no pudieron salvarse.

Ya en este punto el humo y el fuego en el Dupont Plaza era de tal magnitud que los primeros pisos del hotel no se veían. Las personas que estaban en los pisos altos comenzaron a subir hasta el techo del hotel. Muchos lo hicieron por la parte de afuera escalando por los balcones, o por las paredes, otros usaron sábanas amarradas en forma de soga. Hubo personas que se lanzaron al vacío para no quemarse algunos lograron sobrevivir la caída, pero otros no tuvieron la misma suerte. 

Al hotel llegaron cerca 8 helicópteros privados, de la policía, de la Guardia Nacional y de la Guardia Costera que hacían maniobras que parecían sacadas de una película, para rescatar personas atrapadas en el techo del hotel. El Dupont Plaza no tenía un helipuerto ni un lugar lo suficientemente amplio por lo que los helicópteros pequeños tenían que balancearse en una estrecha parte del techo tratando de que las hélices no chocaran con las paredes y así lograr que algunas personas pudieran ser rescatadas. Otros helicópteros grandes como los de la guardia nacional se acercaban lo más que podían al edificio y la gente tenía que brincar hasta caer dentro del helicóptero. Los helicópteros bajaban hasta la playa dejaban a las personas rescatadas y regresaban para continuar los esfuerzos de rescate. Cientos de personas fueron rescatadas por los helicópteros con la ayuda de voluntarios, rescatistas, militares y de la policía.

Cerca de 14 camiones de bomberos, sobre 100 bomberos, y unas 35 ambulancias llegaron hasta el hotel. Los bomberos tardaron más de 3 horas en apagar las llamas, aunque el humo negro continuó durante toda la noche.

98 personas murieron en el incendio del Dupont Plaza el 31 de diciembre de 1986. Unas 140 personas resultaron heridas. La mayoría de las víctimas fueron totalmente calcinadas. Solo un pequeño porciento de los cuerpos encontrados pudo ser identificado con facilidad. 

Al principio de la investigación se pensaba que el incendio había sido accidental, pero de inmediato comenzaron a salir a la luz detalles que apuntaban a que se trataba de un incendio provocado intencionalmente. La unión de tronquistas acusaba al hotel de negligencia y de haber cerrado las puertas del casino para evitar que robaran. Por su parte los encargados de la seguridad del casino y la gerencia acusaban a los tronquistas de haber provocado el incendio.

El secretario general de los Tronquistas, dijo que el sindicato no tenía nada que ver con el incendio, pero sabía que los iba a querer acusar a ellos. El sindicato ofreció una recompensa de $15,000 por información que pudiera ayudar a esclarecer el caso.

Una semana después del incendio, el Gobernador de Puerto Rico, Rafael Hernández Colón, dijo que antes del suceso el gobierno había comenzado a recibir información sobre la situación que ocurría en el Dupont Plaza por el conflicto entre la gerencia y la unión. La información que llegó hasta la oficina del gobernador era que algo iba a suceder el 31 de diciembre en el Dupont Plaza.

Según se desprende de la investigación del FBI y de la ATF varios miembros del sindicato planificaron crear algunos incendios con la intención de asustar a los turistas que querían quedarse en el hotel. A eso de las 2:30 de la tarde al salir de la reunión, luego del voto de huelga, los individuos colocaron latas abiertas de combustible como las que se usan para calentar la comida en los caterings, en un almacén que estaba lleno de muebles que quedaba junto al salón de baile en la planta baja del hotel. Mientras que algunos tronquistas crearon una distracción formando una pelea en las puertas del salón de baile, tres hombres encendieron las latas de combustible en el almacén. La tela los muebles que estaban almacenados que era un tipo de poliéster e hizo que el fuego creciera más de lo que los mismos individuos pensaron y entonces todo se salió de control.

El fuego, combinado con varios otros factores, crearon una tormenta perfecta para que este fuego alcanzara las proporciones que alcanzó ese día.

Una investigación de la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional de los Estados Unidos reveló que ocurrieron sobre 25 violaciones a los códigos de seguridad en el hotel incluyendo la falta de puertas de salida de emergencia en el área del casino lo que contribuyó a que tanta gente quedara atrapada.

El hotel no tenía sistema de riego de emergencia en todos los pisos y los pocos que había no se activaban automáticamente, sino que tenían que ser encendidos manualmente. El sistema de alarma contra incendios del hotel no funcionaba por lo que muchos huéspedes no se dieron cuenta del incendio hasta que olieron el fuego, lo vieron, o escucharon a alguien gritar que había un fuego.

En abril del 1987, tres miembros de la unión de tronquistas fueron acusados como los autores del incendio del Dupont Plaza. Los acusados fueron Héctor Escudero Aponte, de 35 años, Armando Jiménez Rivera de 29 años y José Francisco Rivera López, de 40 años.

Durante el juicio los acusados admitieron ser los responsables del incendio, pero dijeron que su intención era solo provocar un pequeño incendio, como los que habían ocurrido anteriormente, para presionar a la gerencia del hotel. Los acusados fueron encontrados culpables de haber provocado el incendio que cobró la vida de 98 personas e hirió a unas 140 en el hotel Dupont Plaza.

El juez federal José A Fusté condenó a los acusados a penas más altas de las que habían sido solicitadas por la propia fiscalía y por los abogados de defensa. Ante la solicitud de penas menores el juezexpresó lo siguiente;

''No creo que Puerto Rico esté dispuesto a aceptar un asesinato más, un cargamento más de drogas, un acto terrorista más, estamos hartos.” “Es muy difícil para mí seguir sus recomendaciones, porque hacerlo iría en contra de mi conciencia y de la conciencia de la comunidad puertorriqueña''.

El juez Fuste condenó a Héctor Escudero Aponte a dos penas de 99 años, una por un cargo de incendio intencional agravado y otra por la muerte de un agente del Servicio Secreto Federal que estaba en el hotel en el momento del incendio.

José Francisco Rivera López, quien era un bar tender en el Dupont Plaza y que confesó haber incitado a los demás a iniciar el incendio, fue condenado a 99 años de prisión. 

Armando Jiménez Rivera quien era camarero en el hotel, fue sentenciado a 75 años de prisión por haber admitido que obtuvo el combustible de cocina que se usó utilizado para iniciar el incendio. La pena de Armando fue reducida por que inmediatamente después del incendio, fue visto ayudando a la gente a escapar del techo en los helicópteros y fue considerado durante un tiempo antes de la investigación como un héroe.

Los familiares de las personas que murieron y los sobrevivientes de esta tragedia demandaron a la administración del Hotel Dupont Plaza y a un sinnúmero de compañías que eran dueñas o que tenían algún control o intereses en el hotel. 

En total se pagaron alrededor de unos $210 millones de dólares en compensaciones para las víctimas y los familiares del incendio del 31 de diciembre de 1986.

El 25 de septiembre de 1990, tres años después del desastre, el congreso de los Estados Unidos aprobó la Ley de Seguridad contra Incendios de Hoteles y Moteles de 1990. Esta ley exige que todos los hoteles y otros lugares que deseen hospedar a trabajadores federales o realizar actividades financiadas por el gobierno federal tengan detectores de humo en todas las habitaciones y que tengan además sistemas de aspersores de riego o ‘sprinklers’ como le decimos aquí en Puerto Rico si el edificio tiene más de tres pisos.

El hotel Dupont Plaza fue rehabilitado y remodelado y abrió sus puertas al público el 16 de febrero de 1995, bajo el nombre de San Juan Marriott Resort & Casino. Hoy en día se le conoce como el San Juan Marriott Resort & Stellaris Casino.

Armando Jiménez Rivera y José Francisco Rivera López fueron posteriormente liberados de la prisión federal en 2001 y 2002, respectivamente. Héctor Escudero Aponte fue liberado el 12 de enero del 2017.